Hasta ahora, la impresión tampográfica sólo ha podido mostrar diferentes niveles de brillo y gradientes de color, como se conoce en la fotografía, con mucho esfuerzo y generalmente con resultados inestables. Con la ayuda de pantallas de impresión, esta representación podría ser simulada al menos para el ojo humano. Gracias al desarrollo de Tampoprint de clichés estructurables por láser, como el cliché intaglio, y al desarrollo de microestructuras en 3D, como el cliché láser Xi, ahora pueden representarse de manera convincente los gradientes de color y brillo, así como los motivos de impresión en cuatricromía.